1. Dieta blanda

Es imprescindible durante la primera semana y consiste en alimentarte solo con alimentos blandos como pan, gelatina o pasta gruesa. Esto es para no maltratar la herida, ya que los alimentos sólidos podrían golpearla y soltarte los puntos.

2. Abundantes líquidos

Después de la cirugía, debes permanecer bien hidratado y qué mejor que el agua para lograrlo. Además, consumirla con frecuencia te va ayudar a limpiar las baterías que pudieran acumularse en tu boca, especialmente en la herida.

3. Purés variados

Cuando hablamos de purés, no solo nos referimos a los purés de frutas, también hacemos referencia a purés de verduras como la papa, zanahoria, apio. Así mismo, considera los purés proteínicos como los de carne de pollo, evitando los de carnes de mar o cerdo.

Los purés son más recomendados durante la segunda semana. Ten en cuenta que, cuando hagas los purés de fruta, puedes usar tu fruta favorita, pero evitando las cítricas. Así estarías ayudando a tu salud en gran manera.

4. Jugos naturales

Los jugos de frutas naturales tienen un alto contenido de vitaminas y proteínas que te ayudaran en tu recuperación, pero recuerda que estos jugos no deben poseer acidez, pues las frutas ácidas no son recomendadas hasta después de la segunda semana después de la cirugía.

Quizás creas que lo mas cómodo es usar un pitillo para poder tomar tu jugo cómodamente, pero es lo peor, ya que hasta al menos durante los primeros 7 días debes evitar succionar. Lo mejor es usar una cuchara o con un vaso beber suavemente. Es recomendable que realices los jugos sin azúcar.

5. Alimentos que debes evitar

Es bueno saber cuáles son los alimentos ideales para ti, pero también los que no debes comer como los frijoles, jugos cítricos, palomitas de maíz, dulce en exceso, granos y pastas muy pequeñas.

En conclusión, debes evitar todos los alimentos que sean muy pequeños y puedan introducirse en la herida y fermentarse ahí. Esto propiciaría el crecimiento de bacterias que te causarían infecciones y, en el caso de los azúcares, estos estimulan la glándula parótida.

Todas estas comidas que hemos mencionado deben consumirse juiciosamente después de la cirugía y, según cada semana de recuperación, puede irse incorporando algo nuevo a la dieta. Recuerda que esta cirugía solo debe ser realizada por un cirujano especialista.