Cuando nos sometemos a una cirugía de estética nuestra piel y nuestros músculos se ven afectados. Para que estas partes de nuestro cuerpo se recuperen correctamente se requiere del uso de fajas postcirugía para dar un soporte extra a los músculos y la piel.
Entre las diferentes intervenciones quirúrgicas en las que se requiere del uso de fajas postoperatorias están la abdominoplastia, la liposucción abdominal, el lifting de muslos, postparto, entre otras. En estas cirugías el tejido dañado de nuestro cuerpo tiene que curarse y ajustarse a su nueva forma.
Las fajas que los especialistas recomiendan tras estos procedimientos están diseñadas para facilitar la recuperación y acelerar la curación, lo que es muy importante, sobre todo en las cirugías más invasivas.
Ventajas de usar fajas postcirugía
Las fajas postoperatorias mejoran notablemente el proceso de recuperación. Al sostener los vendajes y apósitos que el cirujano coloca después de la cirugía, la faja asegura que las incisiones de mantengan limpias durante las primeras etapas del proceso de recuperación. Gracias a esto el riesgo de infección se reduce.
Además, una faja ayuda a la comodidad del paciente, puesto que al comprimir el área operada se limita el movimiento y afecta lo menos posible a la zona dañada. Nuestras fajas Plié, te dan libertad de movimiento y no te supondrá ningún problema realizar las actividades que desees de forma segura.
La compresión regulada de las fajas postcirugía, disminuye la inflamación habitual del postoperatorio, comprimiendo el espacio intercelular, evitando que el agua presente en la linfa y el plasma sanguíneo se acumule, causando edemas o hinchazón. Otras de sus ventajas son que:
- Reducen la fibrosis.
- Son imperceptibles bajo la ropa.
- Reducen los dolores del postoperatorio.
- Ofrecen mayor control.
- Moldean el cuerpo.
- Reducen la flacidez.
- Ayudan a corregir la postura.
Seguir las indicaciones médicas y usar fajas post quirúrgicas que otorguen el grado adecuado de compresión y promuevan la cicatrización agilizarán el periodo postoperatorio y harán posible el éxito.
En caso de las cirugías plásticas, donde se elimina tejido graso, siempre hay una ligera posibilidad de que el proceso de curación de la piel se haga de manera irregular sobre los tejidos subyacentes o los tejidos que se aglutinan para proporcionar una apariencia desigual del tejido. El uso de una faja ayudará a hacer presión de forma uniforme sobre el área operada, mejorando la adhesión de la piel y la cicatrización.
Son muchos los cirujanos y profesionales que recomiendan utilizar fajas postcirugía después de una intervención quirúrgica. Es muy importante que elijamos la prenda postoperatoria correcta y consultemos con nuestro especialista.
La combinación de la técnica del cirujano profesional con el especializado sistema de funcionamiento de nuestras fajas logra que los pacientes queden totalmente satisfechos con sus efectos.
¿Cuánto tiempo se deben usar las fajas postoperatorias?
El tiempo de uso de una faja dependerá de lo que indique el médico y de cómo vaya el proceso de recuperación. Cuánto más compleja e invasiva sea la cirugía más tiempo requerirá el uso de esta. Por lo general, su uso se extiende entre las cuatro y seis semanas después de la intervención, por lo menos 18 – 20 horas al día.
El especialista será el que determinará cuándo es recomendable que dejes de usarla y por cuantas horas, o si debes usarla únicamente cuando realices ciertas actividades de tu día a día en los meses posteriores a la intervención.
Como hemos visto, el uso de la faja postcirugía es muy importante ya que después de una intervención quirúrgica el cuerpo tarda en adaptarse, así como la piel hasta que se coloque en su sitio.
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