Los cuidados que debes tener en cuenta son:

Alimentarse bien

Una dieta adecuada mejora el proceso de cicatrización y recuperación de órganos que no solo se ven afectados por la cirugía en sí.  La anestesia provoca alteraciones en el habito intestinal, pudiendo generar estreñimiento, lo cual puede ser incómodo y generar molestias adicionales. Por esta razón es importante que consumas agua, frutas, verduras, alimentos ricos en fibra y proteínas que te permitan estar mejor.

Reposar

Descansar y permitir al organismo recuperarse de la inflamación y llevar a cabo una buena reparación, es fundamental para lograr volver al estado previo a la cirugía.  Todo procedimiento quirúrgico requiere de algún grado de incapacidad para trabajar, manejar automóvil, levantar objetos pesados, realizar ejercicio físico, entre otros esfuerzos.  Es fundamental hablar con el médico de los tiempos necesarios de reposo para las diferentes actividades de nuestra vida diaria.

Sin embargo, reposar de las actividades diarias que requieren esfuerzos físicos no quiere decir que se deba estar en cama. La movilización precoz en casa, acompañado de alguien, disminuye la probabilidad de hacer coágulos en las extremidades que puedan representar un riesgo después de la cirugía.

Tomar los medicamentos

Las cirugías generan dolor e inflamación en las zonas donde se realizó la intervención. El cirujano podrá recetarte medicamentos o dispositivos especiales (como fajas, vendajes o masajes) para controlar la inflamación. Es importante cumplir con las recomendaciones y uso de medicamentos, cumpliendo con las dosis, los horarios de toma y el numero de días indicado para su uso.  Auto medicarse, alterar las dosis u horarios de uso, pueden llevar a efectos indeseados.

Aseo personal

Las heridas que se generan después de estas cirugías requieren de unos cuidados y una limpieza especial, la cual debe ser explicada por tu médico y tu deber es llevar a cabo las recomendaciones.  Una herida se puede infectar por diferentes causas, lo mas importante es estar atento ante los cambios que percibas como en el color de la herida o sus alrededores (enrojecimiento), en la temperatura (calor local o fiebre corporal), olor o salida de líquidos.

No fume

El cigarrillo impide la adecuada oxigenación de la sangre, lo cual es un proceso fundamental para la reparación de los tejidos que fueron intervenidos quirúrgicamente.

Los cuidados después de las cirugías podrán requerir de días o hasta meses para volver al estado normal.  Escuche atentamente las recomendaciones de tu médico cirujano.

Tomado de: https://tuoperacionsegura.com/2020/08/05