¿Está el ácido hialurónico en la cuerda floja? Desmontando los mitos sobre el relleno
El ácido hialurónico ha sido el rey indiscutible de los rellenos dérmicos en medicina estética, consolidándose como el inyectable más utilizado a nivel mundial
Durante casi tres décadas, el ácido hialurónico ha sido el rey indiscutible de los rellenos dérmicos en la medicina estética. Avalado por su eficacia y seguridad, se ha consolidado como el inyectable más utilizado a nivel mundial, con la ventaja añadida de contar con un “antídoto”: la hialuronidasa. Sin embargo, en los últimos tiempos, la irrupción de nuevas sustancias y tecnologías en el campo de la medicina estética ha sembrado dudas, generando incertidumbre entre los pacientes. La Dra. Inés Lipperheide, médico estético de DEMYA Martín del Yerro I Amselem, arroja luz sobre esta creciente polarización.
La Dra. Lipperheide atribuye esta desconcertante situación a la constante innovación en el sector. “Parece que en este mundo que avanza con constante presentación de nuevos productos, compuestos activos y nuevas tecnologías, en términos de belleza, la medicina estética y la cosmética, no se quedan atrás”, explica. Las nuevas tendencias, como la aparatología, los exosomas, los polinucleótidos y los péptidos, están restando protagonismo, e incluso denostando, a tratamientos consolidados como el ácido hialurónico, a pesar de su probada utilidad, seguridad y eficacia. Esta dinámica, si bien impulsa el progreso, también puede generar una percepción errónea de que lo “antiguo” es menos efectivo.
“Parece que en este mundo que avanza con constante presentación de nuevos productos, activos y nuevas tecnologías, en términos de belleza, la medicina estética y la cosmética, no se quedan atrás”
EL HIALURÓNICO: UN IMPRESCINDIBLE QUE NO PASARÁ DE MODA
A pesar de las nuevas corrientes, la Dra. Lipperheide es enfática: “El hialurónico siempre va a ser un imprescindible en la consulta de medicina y dermatología estética”. Si bien reconoce que las herramientas y tecnologías para tratar flacidez, manchas o textura han evolucionado, y que existen nuevos compuestos regeneradores de la piel, el ácido hialurónico mantiene su lugar de honor. “Es y seguirá siendo un producto estrella en nuestra consulta porque es seguro, bien prescrito por un médico experto, con una buena formulación, inyectado por manos profesionales, es y seguirá siendo una grandísima herramienta para el reposicionamiento de volúmenes perdidos y la mejora de las arrugas propias del paso del tiempo”, sentencia. Su acción y beneficio en el campo de la medicina estética son innegables.
La Dra. Lipperheide identifica dos problemas principales que han contribuido a la percepción negativa del ácido hialurónico. El primero es el concepto de la “huella estética”. Gracias a herramientas como la ecografía dérmica, ahora es posible visualizar los restos de ácido hialurónico infiltrado años atrás. Esto, si bien es una muestra de su permanencia, ha llevado a algunas personas a dudar sobre su completa “reabsorción”.
El segundo problema, y quizás el más visible, es la asociación del ácido hialurónico con rostros “overfilled” o “pillowface” (caras hinchadas por un exceso de material de relleno). Estas imágenes, que a menudo resultan poco estéticas y evidencian un paso por la consulta de medicina estética de manera poco natural, han ligado injustamente la mala fama al uso del ácido hialurónico, cuando en realidad se trata de un problema de sobretratamiento y mala praxis.
“Es y seguirá siendo un producto estrella en nuestra consulta porque es seguro”
APLICACIONES VERSÁTILES Y BENEFICIOS INNEGABLES
El ácido hialurónico, un componente esencial de nuestro cuerpo que se degrada y regenera de forma natural, es una herramienta sumamente versátil en medicina estética. Su capacidad para proyectar volúmenes perdidos y corregir arrugas es fundamental, gracias a su poder para elevar los tejidos. Además, al captar agua en la matriz extracelular, propicia una mejor hidratación de la piel. También es conocido y demostrado su poder cicatrizante, aplicándose en la medicina estética como mecanismo de regeneración y reparación de la piel y cicatrices, mejorando su grosor y contribuyendo al rejuvenecimiento.
Para disipar la desconfianza, la Dra. Lipperheide aconseja a los pacientes seguir siempre las recomendaciones del médico especialista, realizar todas las preguntas que surjan y ser sinceros sobre sus expectativas y gustos. En caso de no estar conforme con los resultados, la ventaja diferencial del ácido hialurónico es su reversibilidad. La hialuronidasa, una enzima natural, puede inyectarse para disolver el relleno en pocos días, un beneficio que pocos tratamientos en medicina estética ofrecen con tanta eficacia, celeridad y seguridad. El ácido hialurónico, lejos de estar en desuso, sigue siendo un pilar fundamental para obtener resultados naturales y armoniosos, siempre que esté en manos de profesionales expertos.
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